¿Qué es la astenia primaveral?

Todos sabemos que, con la llegada de la primavera, puede llegar también el cansancio, el decaimiento, la somnolencia y cierta irritabilidad… Estas son algunas de las molestias que muchas personas sufren en esta época del año y esto es debido a la astenia primaveral.

La astenia primaveral es una sensación de debilidad y falta de vitalidad generalizada tanto física como intelectual, que no desaparece con el descanso. Esta sensación reduce la capacidad para trabajar e incluso realizar las tareas más sencillas del día a día.

Curiosamente, no aparece después de realizar un gran esfuerzo, como sería lo normal, sino que se manifiesta cuando desarrollamos aquellas actividades habituales incluso las más sencillas. Es más, la astenia puede manifestarse de forma constante, sin que se haya realizado ningún tipo de esfuerzo. Es más frecuente en las mujeres que en los hombres.

Los efectos de la primavera no se manifiestan en todas las personas ni tampoco de igual manera. Sin embargo, sí que es bastante común experimentar pequeños cambios de ánimo que a veces son casi imperceptibles.

 

Causas de la astenia primaveral

La astenia primaveral se debe fundamentalmente a la coincidencia de una serie de factores ambientales:  

• La subida de las temperaturas y de la presión atmosférica.
• Aumento de las horas de luz diurna.
• El cambio horario (al adelantar la hora).
• La modificación de la rutina diaria (horarios de sueño y de comidas, aumento del tiempo de ocio, etc.) como consecuencia de las anteriores.

Por suerte es algo pasajero y suele desaparecer entre una semana y veinte días. Son las mujeres las que más la padecen, así como las personas con edades comprendidas entre los 40 y los 60 años.

La mayor parte de las veces, los efectos de la astenia irán remitiendo con el paso de los días. Una vez nos habituemos a la nueva estación, comenzaremos a sentirnos mejor y todos los síntomas desaparecerán. En definitiva, es cuestión de tiempo.

Síntomas

Los síntomas más frecuentes son cansancio y somnolencia durante el día.

Pero pueden presentarse muchos otros:

• Falta de energía y apatía.
• Alteraciones del sueño, especialmente dificultad para conciliarlo.
• Irritabilidad.
• Ansiedad.
• Pérdida del apetito.
• Malestar general, dolor de cabeza.
• Disminución de la libido o deseo sexual.
• Problemas de concentración.

 

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¿Cuándo? 

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✔️Para mantener la vitalidad

✔️Para favorecer el ánimo

✔️En cambios de estación: primavera, otoño…

✔️Para ayudar a reforzar el sistema inmunitario 

 

En definitiva, si al principio de la primavera te notas más cansado de lo habitual, con menos fuerzas y concentración y te sientes triste, no te asustes, es probable que estés sufriendo astenia primaveral y con nuestros consejos te será mucho más fácil adaptarte a los cambios de estación para combatirla.

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